Fort Tryon Park
Una excursión muy recomendable en Manhattan, para los que huimos del arte contemporáneo, es el Museo The Cloisters. En este museo se pueden contemplar obras de arte del románico europeo, pero no cualquier cosa, no. Se pueden ver objetos como tapices, trípticos, esculturas, orfebrería y también obras de gran magnitud como pórticos de iglesia, capillas enteras o claustros que fueron traídos y montados piedra a piedra en este museo.
Entre las obras más características encontramos el claustro de Sant Miquel de Cuixà proveniente del monasterio benedictino del mismo nombre situado en el Conflent en la Catalunya francesa. También merece la pena un vistacillo a el tríptico de la Anunciación de Robert Campin.
Además de ser un remanso de paz en la Gran Manzana y que llegar hasta allí es toda una aventura (recomendamos el metro, la opción del autobús M4 desde el centro de Manhattan es demasiado lenta ), lo que más nos gustó fue el detallismo con el que se ha edificado y escenificado el lugar ( tienen hasta una plantación de hierbas de la época medieval) y la posibilidad de ver lo grande que es América (literalmente)
En uno de los claustros hay una cafetería donde se puede tomar un tentempié y los pajaritos vienen a saludarte. La vida estresante de la gran ciudad.
Una excursión muy recomendable en Manhattan, para los que huimos del arte contemporáneo, es el Museo The Cloisters. En este museo se pueden contemplar obras de arte del románico europeo, pero no cualquier cosa, no. Se pueden ver objetos como tapices, trípticos, esculturas, orfebrería y también obras de gran magnitud como pórticos de iglesia, capillas enteras o claustros que fueron traídos y montados piedra a piedra en este museo.
Entre las obras más características encontramos el claustro de Sant Miquel de Cuixà proveniente del monasterio benedictino del mismo nombre situado en el Conflent en la Catalunya francesa. También merece la pena un vistacillo a el tríptico de la Anunciación de Robert Campin.
Además de ser un remanso de paz en la Gran Manzana y que llegar hasta allí es toda una aventura (recomendamos el metro, la opción del autobús M4 desde el centro de Manhattan es demasiado lenta ), lo que más nos gustó fue el detallismo con el que se ha edificado y escenificado el lugar ( tienen hasta una plantación de hierbas de la época medieval) y la posibilidad de ver lo grande que es América (literalmente)
En uno de los claustros hay una cafetería donde se puede tomar un tentempié y los pajaritos vienen a saludarte. La vida estresante de la gran ciudad.
Exterior del museo.
El Claustro de Cuixà.
El Claustro de Bonnefont (¡250 especies de plantas!)
Vista del río Hudson y Nueva Jersey desde la terraza occidental.
4 comentarios:
Me gusta mucho tu blog. Acabo de leer el de New York y me ha parecido muy interesante. La verdad es que me alegro de ver un blog sobre viajes con un diseño limpio y nada agobiante.
En relación con el post de NY, yo estuve hace unos años y me pareció impresionante, no tanto como Chicago (será porque fue la primera ciudad que vi de USA), porque necesitas semanas para poder apreciar la ciudad, semanas. Yo estuve pocos días y vi lo típico: Staten Island, Ground Zero, Empire State, Rockefeller Center, Times Square, Central Park y poco más. Espero tener tiempo para volver y si lo hago haré una visita obligada al Museo The Cloisters del que hablas y que por cierto, me atrae y mucho.
Un saludo y sigue así.
Natxo
http://dailyflava.blogspot.com
Gracias por la visita.
NY es realmente impresionante en todo su conjunto hasta da para encontrar recónditos sitios maravollosos como este.
Saludos
És un lloc ben curiós, els Cloisters, i més per a nosaltres que estem tan familiaritzats amb el romànic i el gòtic. Trobar-nos-ho aquí, a l'extrem nord de l'illa, no deixa d'omplir-nos de sensacions ben estranyes, tan lluny de casa. Sensacions que es reprodueixen amb la visita a la Hispanic Society, uns quants carrers més al sud. Una col·lecció és obra del magnat Rockefeller, l'artífex de l'altre museu, el milionari Huntington.
Salut des de NYC
Vaya cosas. Y yo que me pensaba que Londres era una ciudad de contrastes. Nada comparado con esto! [Aunque Londres se lleva el punto de que las cosas viejas son viejas de verdad]
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